lunes, 24 de noviembre de 2008

Declaración de Principios

¿QIÉNES SOMOS?
ENSAMBLE CONTEMPORÁNEO TAKY
“un ensemble para el futuro”

“Taky” es el vocablo quechua que se refiere al canto. El canto como la más noble y primitiva forma de hacer música, de expresar los sentimientos, de comunicarse con el otro.
El Ensemble Contemporáneo TAKY no quiere ser un grupo más de música nueva. El concepto de contemporáneo es abarcativo, simbólico e incluyente, es decir no discrimina entre lo “clásico” y lo popular. Aunque la palabra clásico resulta contradictoria tratándose de música y de arte contemporáneo; podríamos hablar de erudito, culto, académico, o simplemente dejarlo en música contemporánea, música actual.
Es notoria la ausencia de fronteras en gran parte del arte actual. Fronteras entre lo académico y lo popular, ¿dónde termina uno y comienza el otro?
TAKY se interesa por caminar precisamente en esa débil línea entre lo uno y lo otro; nos interesa Cage y Stockhausen, pero también Matilde Casazola y Astor Piazzolla. ¿Quién es el juez que dictamina la imposibilidad de moverse entre ambos? Y el gran Johann Sebastián, el bienamado Bach, ¿no es el mejor ejemplo de un “viejo contemporáneo”?
Latinoamérica es un continente en ebullición permanente en el que se producen soberbias corrientes creativas. ¿Cómo no dedicarles nuestro esfuerzo, nuestro canto y nuestra pasión, si es en estas maravillosas tierras donde hemos nacido?
TAKY le canta a la tierra, pero también al Creador; a los hombres y a esa fascinante geografía que nos rodea. Nos interesa la tradición de nuestros pueblos, pero también la tecnología y por qué no la experimentación. Anhelamos el laboratorio para la creación auténtica y fresca.
“En el principio creó Dios los cielos y la tierra…”, así comienza el libro del Génesis de las Escrituras Sagradas del mundo judeo-cristiano. El primer impulso creador que cada día de nuestra existencia lo vivimos y lo seguiremos viviendo. Somos tan solo opacos ecos o pálidas resonancias de aquel extraordinario impulso creativo.
TAKY se abre a los creadores de Bolivia y del mundo entero apostando un recorrido que nadie sabe a dónde llegará ni cuándo. Quizás ese vértigo del vacío, de la nada, del no saber qué hay del otro lado, es lo que nos impulsa a emprender este desafío

lunes, 17 de noviembre de 2008

ALGO DE HISTORIA SOBRE LA MÚSICA CONTEMPORÁNEA EN BOLIVIA

Bolivia es un país con una inmensa riqueza cultural y musical. El folklore y la tradición andina boliviana han trascendido sus fronteras desde hace mucho tiempo, se admira sus instrumentos y sus coloridas danzas; son muy pocos los países que en América Latina pueden preciarse te tener una variedad tan grande y rica de folklore.
Esta tradición se ha conjuncionado con la tradición y las técnicas compositivas heredadas de Europa, de tal suerte que la creación musical boliviana presenta nítidos rasgos de ese mestizaje.
La música contemporánea en este país ha evolucionado de manera irregular y ha dado muestras de madurez en las últimas décadas, especialmente a partir de la creación de los Festivales Bolivianos de Música Contemporánea el año 1992.
La asimilación y los lenguajes de vanguardia de la Europa Occidental recién impactan a los músicos bolivianos a partir de finales de los 60’s con el retorno a Bolivia del Mtro. Alberto Villalpando, formado en Buenos Aires por Alberto Ginastera y otros eminentes compositores europeos como Olivier Messiaen, Luigi Dallapiccola, Bruno Maderna, Luigi Nono y otros más.
La necesidad de reflejar también una sonoridad boliviana propia impulsa a principios de los años 80 a la creación de la Orquesta Experimental de Instrumentos Nativos como parte del Taller de Música de la Universidad Mayor de San Andrés de La Paz. Esta particular orquesta conformada por instrumentos aerófonos y percusión andina, aun existe como institución independiente y está dirigida por el compositor Cergio Prudencio.
Nuevas generaciones de compositores se han ido formando a partir de la labor docente de Alberto Villalpando. Cergio Prudencio, Nicolás Suárez, Franz Terceros, Freddy Terrazas, Agustín Fernández, Willy Pozadas y otros fueron egresados del Taller de Música de la Universidad Católica de La Paz a finales de los años 70. Gerardo Yánez, Edgar Alandia y Jorge Ibáñez concluyeron sus estudios fuera de Bolivia (Alemania, Italia y Estados Unidos respectivamente) y radican actualmente en esos mismos países.
Desde finales de los 80 surge una nueva generación de compositores tanto dentro como fuera de Bolivia. Javier Parrado, Juan Siles Hoyos y Julio Cabezas, terminaron sus estudios en el Conservatorio Nacional de Música con Villalpando. Gastón Arce Sejas y Oldrich Halas vuelven al país desde Argentina y Alemania. Otros compositores vinculados a la música popular y a la primera Orquesta de Instrumentos Nativos son Oscar García, César Junaro y Javier Tapia.
A finales de los 90’s otro grupo de compositores más jóvenes surge de la Carrera de Música de la Universidad Unión Evangélica Boliviana como Gabriel Callizaya Chambi, Jaime Ramos y María Teresa Gutiérrez.
La reapertura de un nuevo Taller de Música en la Universidad Católica Boliviana el año 2003, produce algunos jóvenes compositores que han comenzado su vida profesional con relativo éxito, como Sebastián Zuleta, Canela Palacios, Hugo de Ugarte, Alejandro Rivas o Adriana Aramayo.
En Cochabamba, nueva residencia del Maestro Villalpando, surge un compositor de mucho talento como es Luis Moya.
Finalmente en el seno de la Carrera de Música de la Universidad Loyola de La Paz, terminan su formación otro grupo de jóvenes compositores que, de la misma manera, se encuentran en la búsqueda por consolidarse dentro del panorama de la creación musical boliviana, como Oscar Kellemberger, Diego Fletcher, David Arze y Carlos Gutiérrez entre otros.
La Orquesta Sinfónica Nacional de Bolivia, la Orquesta Filarmónica Cochabamba, el Trío Apolo, el Ensamble PETRA, la Sinfonietta Loyola, La Orquesta de Instrumentos Nativos de la U. Loyola, el Ensamble Caleidoscopio, la Coral Nova, etc. Son algunas de las instituciones musicales que eventualmente han promovido la ejecución de música nueva, tanto boliviana como internacional. Sin embargo actualmente hay propuestas novedosas y arraigadas en la tradición musical boliviana que le están permitiendo al país lograr una producción auténtica y de muy buena calidad.